"En la guerra, la verdad es la primera víctima" - Esquilo
Introduciendo el concepto de Psyops
Según lo define el Departamento de Defensa de Estados Unidos, podemos describir las Psyops como "Operaciones psicológicas: son el arte de influir en las percepciones y comportamientos de las personas para lograr objetivos estratégicos". La manipulación de la información es una herramienta tan antigua como la guerra misma, pero Internet ha amplificado su alcance y efectividad. Las operaciones psicológicas son la guerra de las mentes, donde las ideas se convierten en armas, y en el plano digital, la información puede ser mucho más poderosa que cualquier arma.
Por lo tanto, se engloban dentro de este concepto todas las actividades estratégicas destinadas a influir en las percepciones y comportamientos de individuos o grupos específicos. Las psyops se basan en tres principios fundamentales:
Persuasión: Utilización de mensajes convincentes para influir en las actitudes y comportamientos de las audiencias objetivo.
Manipulación: Distorsión o fabricación de información para lograr un objetivo específico.
Propaganda: Difusión de información sesgada o falsa para influir en la percepción pública.
El campo de batalla ha cambiado; ahora, las mentes de las personas son el terreno que debemos conquistar.
Un poco de historia
Las operaciones psicológicas o Psyops tienen su origen en las antiguas prácticas militares y políticas. Durante las Guerras del Peloponeso, los griegos usaban propaganda y rumores para debilitar la moral del enemigo. Por ejemplo, los atenienses enviaban mensajes falsos para desinformar a los espartanos sobre sus movimientos militares, generando confusión y desorganización en las filas enemigas.
Los romanos, por su parte, empleaban el espectáculo y la intimidación como herramientas psicológicas. Desfiles triunfales, ejecuciones públicas y la construcción de monumentos servían para mostrar el poderío de Roma y desmoralizar a sus adversarios. La famosa frase "Veni, Vidi, Vici", de Julio César, es un ejemplo de cómo los romanos usaban la retórica para influir en la percepción pública.
Una de las referencias más antiguas que podemos encontrar proviene de Sun Tzu, en su obra "El Arte de la Guerra", donde expuso numerosas estrategias de guerra psicológica. Uno de los mejores ejemplos es su cita"Toda guerra se basa en el engaño. Por lo tanto, cuando somos capaces de atacar, debemos parecer incapaces; cuando usamos nuestras fuerzas, debemos parecer inactivos; cuando estamos cerca, debemos hacer creer que estamos lejos; cuando estamos lejos, debemos hacer creer que estamos cerca".
En el siglo XX , estas operaciones se institucionalizaron dentro de las estrategias militares y gubernamentales. Ejércitos como el de Estados Unidos establecieron unidades especializadas en operaciones psicológicas, como la División de Operaciones Psicológicas del Ejército de los EE.UU, encargada de diseñar y ejecutar campañas de información.
Uno de los ejemplos más relevantes en la historia reciente es el de la Segunda Guerra Mundial, donde se utilizaron técnicas de propaganda de forma muy orquestada, por ambos frentes, para conseguir influir tanto en las tropas enemigas como en la opinión pública. Panfletos, posters y transmisiones de radio fueron medios comunes para difundir propaganda. La Oficina de Servicios Estratégicos (OSS) de Estados Unidos y el Ministerio de Propaganda de Alemania Nazi, dirigido por Joseph Goebbels, fueron responsables de este tipo de campañas.
Transición al ciberespacio
Con la digitalización, las psyops tienen un nuevo campo de acción, donde se ha transformado la forma en la que la información se difunde, permitiendo que los mensajes lleguen a audiencias globales en cuestión de segundos. Esta capacidad ha sido explotada por actores estatales y no estatales para llevar a cabo campañas de desinformación y manipulación.
Uno de los ejemplos lo hemos podido observar recientemente en las elecciones presidenciales de EE.UU de 2016, donde Rusia fue acusada de utilizar bots y trolls en redes sociales para difundir información falsa que pudiera influir en la opinión pública, sembrando discordia y llegando a interferir en los resultados.
También China se ha hecho partícipe de la utilización de este tipo de técnicas, ya que utiliza sus plataformas digitales para promover sus intereses geopolíticos y desestabilizar a sus oponentes. Mediante la creación de cuentas falsas y la difusión de contenido manipulado, buscan influir en la percepción pública tanto dentro como fuera de China.
Y también han influido en el mundo del cibercrimen. Un ejemplo claro es el uso de campañas de phishing que apelan a los miedos y deseos de las víctimas, engañándolas para que revelen sus credenciales o descarguen malware. Además, los ataques de ingeniería social, donde los ciberdelincuentes manipulan psicológicamente a las personas para obtener información confidencial, son una manifestación directa de las psyops en el cibercrimen.
Pero no sólo han sido utilizadas por "los malos". Hemos ido nombrando este término en diferentes ocasiones recientemente cuando hablábamos de la Operación Cronos y también lo introducimos cuando hablamos de la disrupción de Breachforum, que puedes leer más sobre ello en este artículo. Las fuerzas y cuerpos de seguridad a lo largo del mundo que han participado en este tipo de operaciones han utilizado técnicas de desinformación y manipulación psicológica con el fin de sembrar el caos y la confusión, explotando las vulnerabilidades humanas para obtener acceso a información sensible o para provocar comportamientos deseados, como ha podido ser la pérdida de confianza de los afiliados hacia un grupo de ransomware.
Ojo: Que la hayan utilizado no quiere decir que siempre hayan salido bien.
Componentes y estrategias de las Psyops
En el ámbito de las psyops, se emplean diversas tácticas, entre las que destacan:
Desinformación: Difusión de información falsa o engañosa para confundir o engañar a la audiencia. Ejemplo: La difusión de rumores falsos sobre eventos políticos para desestabilizar gobiernos. Ejemplo: Durante la pandemia de COVID-19, se difundieron numerosos rumores y teorías de la conspiración para desinformar al público sobre el virus y las vacunas.
Operaciones de Falsa Bandera: Actos diseñados para parecer que han sido llevados a cabo por otro grupo o nación. Ejemplo: En 1939, los nazis llevaron a cabo el ataque de Gleiwitz, una operación de falsa bandera donde simularon ser perpetrada por polacos para justificar la invasión de Polonia.
Ataques Psicológicos: Acciones destinadas a erosionar la moral y la confianza de un grupo objetivo. Ejemplo: La campaña de desinformación rusa conocida como "Operation Infektion" en la década de 1980, que afirmó falsamente que el virus del SIDA fue creado por Estados Unidos como un arma biológica.
En el plano del ciberespacio, se han desarrollado nuevas herramientas y técnicas que son específicas de este plano, un ejemplo de ello podría ser:
Bots y Redes Sociales: Utilización de bots para difundir mensajes rápidamente y manipular conversaciones en redes sociales. Los bots son programas automatizados que pueden simular la actividad humana en las redes sociales. Se utilizan para difundir mensajes rápidamente y manipular conversaciones en línea. Los trolls humanos también participan en estas operaciones, creando y compartiendo contenido engañoso para influir en la opinión pública.
Plataformas de Medios Digitales: Creación de sitios web y blogs falsos para difundir propaganda. Los actores malintencionados crean sitios web, blogs y cuentas de redes sociales falsas para difundir propaganda y desinformación. Estas plataformas se diseñan para parecer legítimas y creíbles, engañando así a los usuarios. Ejemplo: El uso de sitios de noticias falsas para difundir historias inventadas durante conflictos geopolíticos.
Filtración de Información: Acceso no autorizado a información sensible para manipular narrativas. Esta información puede ser verdadera, aunque la obtención es siempre de forma ilegítima, pero su presentación y el contexto en el que se libera están diseñados para causar daño. Un ejemplo de este tipo de técnicas podría considerarse la filtración de correos electrónicos del Comité Nacional Demócrata (DNC) en 2016, que fue utilizada para influir en la percepción pública de los candidatos presidenciales.
¿De qué forma todo esto puede influir en las personas?
Al manipular información y jugar con las emociones y creencias de las personas, estas operaciones pueden generar polarización social, desconfianza en las instituciones y desestabilización política.
Polarización Social
Las psyops pueden exacerbar divisiones existentes dentro de la sociedad al promover narrativas polarizadoras. Esto puede llevar a una mayor fragmentación social y a un aumento de la tensión y el conflicto entre diferentes grupos. La polarización no solo afecta la cohesión social, sino que también puede ser explotada por actores malintencionados para desestabilizar países y gobiernos.
Desconfianza en las Instituciones
La desinformación y las campañas de manipulación pueden erosionar la confianza del público en las instituciones, incluyendo gobiernos, medios de comunicación y organizaciones internacionales. La pérdida de confianza en las fuentes de información legítimas hace que las personas sean más susceptibles a creer en teorías de conspiración y noticias falsas, lo que a su vez debilita la cohesión social y la estabilidad política.
Desestabilización Política
Al influir en las percepciones y comportamientos de los votantes, las psyops pueden afectar el resultado de elecciones y procesos políticos. Esto puede llevar a la desestabilización de gobiernos y a la erosión de la democracia. Las operaciones psicológicas también pueden ser utilizadas para desacreditar a líderes y partidos políticos, minando su legitimidad y capacidad para gobernar.
¿Por qué decimos que la Operación Cronos o el cierre de Breachforum podrían ser parte de una psyops?
En la Operación Cronos pudimos observar que los FFCCSS jugaron a un juego meramente estratégico, que dejaba intuir que no era la desarticulación de la banda el fin último de la propia operación, sino influir en su autodestrucción. No solamente estaba centrada en tirar abajo el sitio web, conseguir información o realizar algún que otro arresto, sino que jugó con la psicología de los integrantes del grupo más famoso de ransomware de la historia, Lockbit.
Por un lado, pudimos observar que se mandó un mensaje claro a los cibercriminales en general; tenemos capacidades y estamos cooperando. Haciendo públicos los resultados de la operación (aunque pusieran un poco de maquillaje) y destacar la unión de fuerzas, daban la imagen de ser un adversario digno. O al menos, esa era su intención.
Respecto a la banda, la idea era sembrar la desconfianza y el mensaje estaba claro "os estamos dando caza". Eso en principio parecía estar diseñado para crear confusión en los operadores y que fueran más reacios a seguir trabajando con el grupo, así como también disuadir a posibles futuros miembros de que lo hicieran.
También, toda la presión que pusieron sobre la cabeza de LockbitSupp fue una de las partes magistrales de la operación. En primer lugar, cuando revelaron que sabían quién era este, puso una presión adicional sobre la cabeza de este, infundiendo miedo. Todos sabemos que el error humano es el que permite se pueda apresar a un delincuente especialmente difícil, y todo estaba diseñado para desquiciar a esa mente y que cometiera lo que estaban esperando, un fallo.
Aunque, no todo salió como creemos que esperaban.
Por otro lado, sobre el cierre de sitios tan destacables como lo fue Raidforums en su momento y Breachforums en la actualidad, es lógico que las autoridades conocen perfectamente la técnica habitual que siguen este tipo de grupos, cae un sitio web, levantan otro. Por lo tanto, la forma de actuar no debía estar tan centrada en sí en la retirada del sitio web, si no en la influencia sobre la cúpula que dirige.
En este caso, estaban enviado un mensaje claro a los administradores de este tipo de sitios "no estáis seguros y vamos a por vosotros", ya que en todo momento se han centrado en la detención de las figuras líderes de estos foros. Es un movimiento que influye en que, poco a poco, la gente no quiera asumir este tipo de responsabilidades, aunque no surte efecto inmediato.
Además, este tipo de operaciones también influye en los actores que participan en estos espacios. Cada cierre desmoraliza a los usuarios y crea un ambiente de incertidumbre y paranoia, haciendo que los ciberdelincuentes sean más cautelosos y menos efectivos. Fragmentan las comunidades, dificultan la colaboración entre ellos y crean también cierto miedo e inseguridad en los usuarios que son consumidores.
Por todo ello pensamos que ambas operaciones han tenido una fuerte dosis de Psyops. Y es también por esto que intentamos en cada una de ellas analizar el comportamiento y los patrones que podemos observar para tratar de desentrañar los movimientos que todos los jugadores están haciendo en el tablero.
Concluyendo...
Las operaciones psicológicas o Psyops han evolucionado hacia la digitalización, convirtiéndose en una de las armas centrales más poderosas que los gobiernos tienen a su disposición. Son usadas por ambos bandos y el target siempre es el mismo: La población.
Cada día estamos más lejos de la verdad y todo lo que vemos podría ser parte de una gran pantalla de humo. Por ello, cada día debemos ser más autocríticos y más desconfiados con la información que recibimos. La ciberinteligencia aquí debería jugar un papel importante, que parece que estamos pasando por alto, ya que uno de sus objetivos debe ser la protección de la percepción de la realidad.
No necesitas armas para hacer una guerra; a veces, todo lo que necesitas es la verdad bien dirigida.